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5 de noviembre de 2009

A LA FALTA DE RECEPTÁCULOS PÚBLICOS DE BASURA EN TODA LA CIUDAD Y SU PERIFERIA Y UN SISTEMA DE RETIRO PERIÓDICO

OVEJA NEGRA 5-11-9 Se echa de menos una inversión municipal que disponga de contenedores para la basura en todos los lugares de la ciudad, así como en su periferia. Existen pocos, y estos se encuentran por lo general rebalsados, convirtiéndose […]

OVEJA NEGRA 5-11-9
Se echa de menos una inversión municipal que disponga de contenedores para la basura en todos los lugares de la ciudad, así como en su periferia. Existen pocos, y estos se encuentran por lo general rebalsados, convirtiéndose en un foco de inmundicia y en la delicia de los perros vagos. Muchas ciudades progresistas han implementado este sistema, incluso algunas con menor cantidad de habitantes que la nuestra, lo que ha favorecido en grado importante terminar con la basura desparramada en cualquier parte. Es un hecho que la suciedad llama a la suciedad. Cuando alguien ve que hay basura por todas partes, se cree con derecho a depositar allí lo que le estorba. No basta con el sistema de recolección domiciliaria; se requiere además de un plan regular de retiro de contenedores que deben ser numerosos y estratégicamente situados. Es fundamental no quedarnos atrás en esta materia, para luego incluso dar otro paso y disponer receptáculos diferenciados dependiendo del tipo de deshechos, como también sucede desde hace mucho tiempo en las ciudades de mayor desarrollo. Pensemos en el turismo, y en la calidad de vida que los habitantes de Puntarenas merecemos y avancemos en esta materia. A la falta de estos contenedores, damos hoy nuestra Oveja Negra de Polar.