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23 de marzo de 2009

A LA LENTA REACCIÓN FRENTE A LA PRESENCIA DEL PULGÓN QUE AFECTA A CIPRESES DE NUESTRA CIUDAD.

En este espacio abordamos hace poco lo sucedido con los árboles cipreses de las plazas de Armas y O’Higgins de Puerto Natales. La lenta reacción ante la plaga del pulgón que afectó a estas especies, terminó con la lamentable pérdida […]

En este espacio abordamos hace poco lo sucedido con los árboles cipreses de las plazas de Armas y O’Higgins de Puerto Natales.
La lenta reacción ante la plaga del pulgón que afectó a estas especies, terminó con la lamentable pérdida total de 20 ejemplares, que debieron ser talados, y con daños en muchos otros, que hoy están siendo tratados para intentar salvarlos.
No podemos cometer el mismo error en nuestra ciudad. Nuestras avenidas, parques y el cementerio municipal, se caracterizan por la presencia de añosos cipreses, que mediante la poda sistemática, le dan una característica única a Punta Arenas. Estas especies constituyen un patrimonio urbanístico muy valioso, y todos tenemos el deber de conservarlo.
Por desgracia, algunos ejemplares muestras señales de estar siendo afectados por el pulgón. Por el momento con pequeñas manchas anaranjadas. Pero, así comenzó el desastre en Puerto Natales, por lo que no es posible que no reaccionemos ahora de manera inmediata y eficiente.
Por el momento la inquietud ha sido plateada por particulares, vecinos que temen que la burocracia o indolencia, impida que se actúe a tiempo.
Ocupamos este espacio para reforzar esta voz de alerta.
A que aún no se tomen medidas para evitar que esta plaga dañe este patrimonio urbano, damos hoy nuestra Oveja Negra de Polar.