0d48ec9d-a119-4787-8781-70de66845b73-medium-standard-q100.png

23 de diciembre de 2014

EL VIEJITO PASCUERO YA SE APROXIMA A LA REGIÓN Y DEJA SU MENSAJE NAVIDEÑO

En estas fechas de finalización de año y de navidad se busca encontrar el verdadero sentido de estos momentos, fundamentalmente junto a los seres queridos, siendo además instantes de reflexión, de análisis, de evaluación y tratando de expresar los mejores […]

En estas fechas de finalización de año y de navidad se busca encontrar el verdadero sentido de estos momentos, fundamentalmente junto a los seres queridos, siendo además instantes de reflexión, de análisis, de evaluación y tratando de expresar los mejores sentimientos frente a los semejantes, pues en general nos inunda un espíritu positivo y de mayor bondad o por lo menos es lo que se refleja exteriormente.

Pero además se trata de hacer entender a nuestra comunidad que no son momentos de alto consumismo y de gastos excesivos o pensar que el mundo ya se va a acabar, sino muy por el contrario tratar de comprender que se recuerda el nacimiento de un niño en un humilde pesebre, sin lujos y simplemente entre los animales para la salvación del mundo y que los reyes magos asomaron en aquél remoto día dejando sus obsequios a este niño que a partir de ese día cambió la forma de ver el mundo y guía a la mayoría de los seres humanos por una senda de esperanza.

Pero también es una fiesta de los niños en que los pequeños esperan ansiosos ser reconocidos y regalados por el viejito pascuero que trabaja todo el año para hacer realidad los sueños de los más chicos de la casa, fiesta a la cual se suman los adultos, abriendo su corazón de niños.

Pedro Alvarado es un viejito pascuero que nos deja su mensaje y siempre está dispuesto y disponible para llevar alegría y felicidad a los hogares de Punta Arenas.

Con un buen sentimiento que alberguemos en esta navidad ya nuestra capacidad de ser humanos se reconocerá para hacer sentir que nuestra presencia en la vida ha valido la pena, además que es un sentimiento personal del cual cada uno de nosotros toma su propia conciencia y nada ni nadie podrá arrebatar jamás