0d48ec9d-a119-4787-8781-70de66845b73-medium-standard-q100.png

14 de marzo de 2017

FRAGILIDAD Y EMERGENCIAS EN EL TERRITORIO

Señor director: Cómo lograr entender que los eventos naturales no deben ser considerados como desastres. Parece difícil, al ver en el último año desbordes de ríos, aluviones, marejadas, deshielos e incendios forestales, junto a ciclos más cortos de terremotos y […]

Señor director:
Cómo lograr entender que los eventos naturales no deben ser considerados como desastres. Parece difícil, al ver en el último año desbordes de ríos, aluviones, marejadas, deshielos e incendios forestales, junto a ciclos más cortos de terremotos y tsunamis, además de cuantiosas pérdidas materiales y humanas.
Por otro lado no estamos bien preparados, pues seguimos siendo un país de reacción, con un vago conocimiento del territorio y donde se ha instalado la idea que todo lo que pasa se debe al “cambio climático”. Por lo tanto, resolver cómo podemos enfrentar esos eventos debe aparecer como una prioridad en el país, siendo fundamental el aporte y conocimientos provenientes de las distintas disciplinas.
Desde la Arquitectura hay que promover el cuidado por el medio ambiente, incentivar en la sociedad la valorización por las culturas y realidades locales y regionales, otorgar mayores autonomías en la construcción originaria sustentada en los conocimientos geográficos, paisajísticos y arquitectónicos locales, e incorporarlos en la educación. Así también, es necesario profundizar el conocimiento del territorio local, en relación a los aspectos mencionados.
Construir puentes sobre el territorio no debiera ser sólo un tema de conectividad, sino la construcción de una mentalidad más solidaria, colaborativa e inclusiva que nos permita instalar el concepto de calidad de vida. Junto a ello, una planificación territorial adecuada podría dar luces para tener mejores herramientas para prevenir y actuar frente a las emergencias.

Uwe Rohwedder G.
Director Escuela de Arquitectura
Universidad Central de Chile