No podemos más que estar de acuerdo y compartir las opiniones de quienes por estos días, al calor de las campañas, se dan el tiempo para conversar y analizar las ideas, propuestas, programas, contenidos y reflexiones de los y las candidatas que están disponibles en medios de comunicación local y en redes sociales, en directa proporción y relación con la capacidad económica que tienen para comprar espacios, naturalmente.
A partir de lo anterior se genera el primer consenso: cuanto más sale en medios, más dinero tiene y más cansa.
Cuando decimos que no podemos más que compartir las opiniones, nos referimos a que entre quienes se interesan y observan con cierta sagacidad las diversas muestras de elocuencia del desarrollo político local, lo que se concluye en general es la falta de contenidos, la levedad con que se tratan algunos temas, el desconocimiento de lo que se comenta y una suerte de reflejo condicionado que se traduce en estar de acuerdo con todo lo que evidentemente a las personas les parece mal y en total acuerdo con todo aquello que se considera bueno y positivo. Una suerte de empatía a toda prueba que pretende asegurar la aprobación de las mayorías.
Llegamos entonces al segundo consenso: hablan, hablan y hablan como si algo quedara.
También comentábamos que en este saco entran candidaturas militantes, candidaturas independientes, candidatura viejas y candidaturas jóvenes, pero destaca la “nueva categoría de candidatura” que siendo militante de un partido, oculta su militancia a toda costa, se desmarcan de las principales figuras de su partido y juegan a esta nueva fórmula del éxito, que dice que puedes usar el cupo del partido, los recursos del partido y los contactos del partido para ser candidato o candidata, al tiempo que puedes aparecer públicamente como él o la mas prístina de las figuras en política. Con un pasado a toda prueba y un futuro que incluye precisamente a todos quienes los escuchan. Obviamente que un buen eslogan “nada de político” es primordial.
Tercer consenso: no todo está inventado en política. Hay hibridismo sin límite, o al menos hasta que se degenere la especie.
Alguien decía, hay excepciones que siempre dan cuenta de saber de lo que hablan y de manifestarse con seriedad y profundidad ante diversos temas. Personas que si se las escucha con atención, son capaces de trasmitir ideas e inclusive algo de originalidad. Personas que usan los colores de su partido, el nombre de su partido y manifiestan un permanente compromiso con las ideas que defienden.
Conclusión y cuarto consenso: no todo está perdido.
Debo reconocer que el cansador discurso anti político y anti partido no es tema y menos el famoso desencanto por la política y los políticos, entre quienes analizan estos tópicos, por una razón muy simple. Ocurre que quienes se interesan en la política y han votado siempre en conciencia por quienes han planteado ideas y contenidos no pueden sentirse desencantados ya que sus candidatos son fieles representantes de lo que dicen ser y naturalmente de lo que hacen. Cuando mucho, puede haber momentos de desacuerdos políticos puntuales por algunas actuaciones.
Dicho sea de paso, son quienes no votan o quienes han votado por personas de dudosa calidad moral y carente de todo contenido ideológico y político, quienes se sienten más desencantados.
Hoy podemos estar en desacuerdo y podemos diferir en muchos ámbitos, pero para eso se requiere de propuestas. Se requiere de cierta elaboración política de las candidaturas y de cierto esfuerzo por analizar estos asuntos, de parte del ciudadano.
Ambas cosas están ausentes hoy en gran medida.
En relación a nuestro Partido Comunista, dentro de estas conversaciones me comentaban hoy que, ante la consulta a un candidato a Gobernador por Magallanes de si había hablado con el PC por un eventual apoyo – ante la bajada por secretaria del candidato propio – manifestó que el Partido Comunista dejaba en libertad de acción a sus militantes.
Mal informado está, ya que el Partido Comunista no ha dejado nunca ni dejará a sus militantes en libertad de acción. No es esta una práctica política propia de un partido Marxista Leninista, es más, no debe ser la práctica de ningún partido político serio. Salvo que se trate sólo de una colección de personas con múltiples intereses puramente personales y sin propuesta política colectiva que plantear o defender.
También me contaban que este candidato habría manifestado que el Partido Comunista tomaba decisiones políticas nacionales en estos temas. Refiriéndose a la opción que apoyaría el Partido Comunista a Gobernador.
Al respecto es necesario expresar que la elaboración de la política partidaria se origina en las células y entre los militantes del Partido, así se construye una opinión colectiva que es asumida por el conjunto del Partido, lo que es muy distinto a que las decisiones se tomen en el centro del país. En el caso de la política local, es evidente que el Partido debe decidir en el propio territorio cual será su accionar. Justamente en estos días se debate este tema al interior de nuestras filas.
Hay dos cosas que no van a ocurrir al interior del Partido: una es que los comunistas se declaren en libertad de acción, y la otra es que pasemos a formar parte de los desencantados y desilusionados de la política. Trabajamos para llevar adelante una política clara, fundada en contenidos y principios. Lo que se conoce como programa político. Ese mismo que muchos no tienen y que otros no leen cuando deben hacerlo.

DALIVOR ETEROVIC DÍAZ
PRESIDENTE REGIONAL MAGALLANES
PARTIDO COMUNISTA DE CHILE