«No vamos a renunciar al deber de garantizar a los magallánicos y magallánicas mejores servicios e infraestructura marítima, es nuestra verdad y responsabilidad pública».

Así se expresó el secretario de Gobierno, Eduardo Barros, al explicitar las razones por las cuales se lleva adelante el Plan de Conectividad Austral. En el caso de la región éste contempla la construcción de una barcaza para el cruce entre Punta Arenas y Porvenir, y la modernización de terminales.

La autoridad manifestó que esta iniciativa significa regular un servicio que en la práctica actúa como monopolio, y que el deber del Estado es velar por una mejor conectividad de las personas de las zonas aisladas de Magallanes.

Indicó que es evidente que los habitantes de esos territorios requieren terminales adecuados, y que por ello se encuentran en ejecución los diseños de Bahía Chilota (Tierra del Fuego) y Tres Puentes (Punta Arenas).

Agregó que en los próximos se licitarán los diseños de infraestructura de Puerto Williams y Primera Angostura del Estrecho de Magallanes. Mientras que en Puerto Natales, este año se licitará la ejecución del terminal de pasajero. «Así avanzamos en forma concreta en el plan de conectividad», puntualizó Barros.

Precisó que «con el nuevo sistema (Plan de Conectividad) queremos mejorar el servicio y dar certeza en las frecuencias, y así evitar, por ejemplo, la situación que aconteció el pasado 6 de abril, cuando se cambió el horario de zarpe en Porvenir debido a que barcaza estaba destinada a las pingüineras para hacer turismo.

«Seamos claros, cuando disponemos de una embarcación con 40 años de servicio, no podemos afirmar que ofrece estándares internacionales o de primera calidad. Es claro que no es prioridad el transporte de los fueguinos cuando la misma nave está ofertada para cubrir otros puntos como la Isla Magdalena, Cámeron, Puerto Arturo y Puerto Yartou, tal como se consigna en la página web de la propia empresa», acotó el secretario de Gobierno.

Más adelante, señaló que es satisfactorio que el sector privado invierta en una nueva embarcación; que utilice las franquicias tributarias y se interese por el Plan de Conectividad retirando las bases para la precalificación.

Añadió que las autoridades esperan que el sector privado reciba con un espíritu constructivo la incorporación de una nueva embarcación, como también el mejoramiento de la infraestructura portuaria, porque eso beneficia directamente a los pasajeros.

«Cómo no vamos a querer que Puerto Williams tenga un mejor servicio. Las personas que allí residen deben viajar 36 horas en una butaca, pagando 51 mil pesos; con un sistema arcaico para la recepción y entrega de carga; sin un lugar para el acopio y sin una mínima pluma para la carga pesada.

«Claramente no son las condiciones que merece la población más aislada del país. Es cierto que el subsidio siempre resulta insuficiente, pero el Estado en los últimos años, a lo menos, ha triplicado este aporte. Por eso se destinan 28 millones de pesos mensuales por este concepto, sin que ello se traduzca en un cambio sustantivo en las condiciones del servicio», enfatizó.