Recursos adicionales por 6 mil 148 millones de pesos, más una línea de 850 millones de pesos para créditos de corto plazo, recibió el Instituto de Desarrollo Agropecuario (INDAP) para completar la entrega de ayuda a los agricultores afectados por las heladas y nevazones que azotaron al país durante este invierno, y cuyos efectos aún se dejan sentir entre las regiones de Atacama y Los Lagos.

El Ministerio de Hacienda firmó el decreto que autoriza la entrega de dineros adicionales al presupuesto del organismo de fomento agrícola, para continuar con el apoyo cuanto antes a la recuperación productiva de los pequeños agricultores y agricultoras.

Hace 40 años que Chile no sufría un inverno tan duro. Esta situación ha dejado serias secuelas y daños materiales en las pequeñas y micro empresas campesinas, daños que en este sector podrían superar los 9 mil millones de pesos de acuerdo al catastro elaborado por INDAP. El director nacional del organismo, Hernán Rojas, explicó que estos recursos adicionales permitirán “finalizar el operativo alimentario, es decir la cobertura de alimento y forraje para el ganado; y, además, acelerar el proceso de reconstrucción productiva de aquellos que tuvieron pérdidas en sus cultivos”.

Los 6 mil millones estarán destinados íntegramente a la compra de forraje, alimento concentrado y suplemento lácteo que falte por distribuir; a los programas de incentivos para la recuperación productiva, que se traducirá en la reposición de invernaderos, plantaciones, frutales y toda la maquinaria que haya sido dañada; y a la entrega de un subsidio especial para ayudar a pagar los créditos directamente afectados por la emergencia climática de aquellas personas que hay visto dañada su capacidad de pago.

“Con esto, Hacienda entregó una señal de respaldo a la labor que hemos estado desplegando en terreno desde el mismo momento en que comenzaron a sentirse los primeros embates del clima; acá hay que dejar bien en claro que el Ministerio de Agricultura y el INDAP han estado monitoreando las pérdidas, los daños, los afectados, y entregado ayuda desde el inicio de esta crisis”, aclaró Rojas.

De acuerdo a las instrucciones del gobierno central, estos recursos vienen a completar las ayudas que se habían dispuesto al declararse la zona de emergencia agrícola y de catástrofe en 172 comunas entre las regiones de Atacama y Los Lagos.

Habría menos praderas

La unidad de seguimiento de la emergencia del INDAP confirmó -en tanto- que uno de los efectos de las pasadas nevazones y heladas será un posible retardo en el crecimiento de las praderas, lo que podría incidir de manera directa en la cantidad de alimento disponible para el ganado y las crías que ya estaban naciendo a contar de septiembre.

Al respecto, Hernán Rojas adelantó que por un lado se utilizarán los nuevos recursos inyectados por Hacienda para comprar forraje y alimento, pero que “además tendremos especial cuidado de utilizar los instrumentos usuales del INDAP para la recuperación de suelos y la implementación de praderas suplementarias: ambas medidas deben estar operando antes de que finalice octubre”.

Durante el desarrollo de la crisis climática, INDAP tuvo que desplegar en terreno a más de 400 funcionarios entre las regiones de Atacama y Los Lagos, con el objeto de financiar y coordinar la entrega de un total de 185.882 fardos y 6.438 toneladas de alimento concentrado con un costo a la fecha de 1.820 millones de pesos. El invierno pasado afectó a un total de 61.492 pequeños productores y a una masa ganadera de 945.000.

“Con esto, Hacienda entregó una señal de respaldo a la labor que hemos estado desplegando en terreno desde el mismo momento en que comenzaron a sentirse los primeros embates del clima; acá hay que dejar bien en claro que el Ministerio de Agricultura y el INDAP han estado monitoreando las pérdidas, los daños, los afectados, y entregado ayuda desde el inicio de esta crisis”, aclaró Rojas.

De acuerdo a las instrucciones del gobierno central, estos recursos vienen a completar las ayudas que se habían dispuesto al declararse la zona de emergencia agrícola y de catástrofe en 172 comunas entre las regiones de Atacama y Los Lagos.

Habría menos praderas

La unidad de seguimiento de la emergencia del INDAP confirmó -en tanto- que uno de los efectos de las pasadas nevazones y heladas será un posible retardo en el crecimiento de las praderas, lo que podría incidir de manera directa en la cantidad de alimento disponible para el ganado y las crías que ya estaban naciendo a contar de septiembre.

Al respecto, Hernán Rojas adelantó que por un lado se utilizarán los nuevos recursos inyectados por Hacienda para comprar forraje y alimento, pero que “además tendremos especial cuidado de utilizar los instrumentos usuales del INDAP para la recuperación de suelos y la implementación de praderas suplementarias: ambas medidas deben estar operando antes de que finalice octubre”.

Durante el desarrollo de la crisis climática, INDAP tuvo que desplegar en terreno a más de 400 funcionarios entre las regiones de Atacama y Los Lagos, con el objeto de financiar y coordinar la entrega de un total de 185.882 fardos y 6.438 toneladas de alimento concentrado con un costo a la fecha de 1.820 millones de pesos. El invierno pasado afectó a un total de 61.492 pequeños productores y a una masa ganadera de 945.000.

cabezas de ganado, lo que ha obligado a INDAP a invertir casi 4 mil millones de pesos hasta la fecha para recuperar la capacidad productiva dañada y asegurar la alimentación de los animales.

Todo este trabajo se ha desarrollado de manera coordinada con los municipios, las organizaciones campesinas, los gobiernos regionales y los parlamentarios de cada zona, tanto de gobierno como de oposición, sostuvo el director de INDAP.