11 de enero de 2013
Malas condiciones hacen peligrar el trabajo en terreno de los científicos nacionales que comenzaron a llegar vía aérea este martes a la isla Rey Jorge para participar en la 49ª Expedición Científica Antártica, organizada por el Instituto Antártico Chileno (INACH). Fuertes vientos con rachas de hasta 120 km/h, acumulación de nieve y hielo en forma importante y temperaturas que llegan a una sensación térmica de -20 ºC, reciben a los primeros 28 investigadores que estarán en enero en diversos puntos de las islas Shetland del Sur.
Quienes viven en el sector de Villa Las Estrellas y las bases Frei (Fuerza Aérea) y Escudero (INACH), dicen que este año el invierno se retrasó y se está extendiendo por sobre lo normal. Estas condiciones podrían hacer que muchos de los 38 proyectos nacionales que viajarán a la Antártica no puedan cumplir con los objetivos planteados. Esta es algo inesperado, comenta José Retamales, director nacional del INACH.
La situación complica especialmente a las investigaciones que estarán en campamentos y refugios, tanto en la isla Livingston como Rey Jorge. El suelo con hielo hace difícil el tránsito y la toma de muestras. De hecho, la base científica del instituto polar nacional tiene todo un sector bajo la nieve.
Según el meteorólogo Ricardo Alcafuz, jefe del Centro Meteorológico Antártico Eduardo Frei Montalva, de la Dirección General de Aeronáutica Civil, en diciembre la temperatura máxima media fue de -0.8 °C mientras que la mínima media fue de -2,6 °C. La temperatura mínima media está bien dentro de lo normal para la época, sin embargo, la temperatura máxima media es anómala en el sentido de que es muy baja para la época. Corresponde más bien a una temperatura del mes de noviembre, acota.
Otro punto importante son las precipitaciones. Para las personas que han estado varias veces en la isla Rey Jorge, este año la cantidad de nieve acumulada es demasiada para el verano. De confirmarse objetivamente el hecho, las causas podrían deberse a que como cayó más nieve que en años anteriores y las temperaturas máximas han sido relativamente bajas, ha tomado más tiempo para que este gran volumen se derrita, puntualiza Alcafuz.
Fenómeno en estudio
Según Ricardo Jaña, glaciólogo del INACH, algunas investigaciones indican que el calentamiento climático trae aparejado mayores precipitaciones en el sector. Algunas informaciones obtenidas desde testigos de hielo muestran un incremento de hasta el doble en la acumulación de precipitación en forma de nieve en la base de la península Antártica. El 2008 fue evidenciado en las actividades del Proyecto CASA de Chile, Brasil y EE. UU., en el Plateau Detroit, donde las balizas y la estación meteorológica quedaron cubiertas por más de cuatro metros de nieve, acumulados en el transcurso de ese año, explica.
Así, la mayor precipitación en el sector está siendo hoy objeto de estudio para su comprensión e interpretación. Pero no es un fenómeno fácil de entender. La variabilidad climática en la península Antártica, si bien muestra que en los últimos 60 años hay una tendencia de aumento de la temperatura media del aire en 3 ºC, señalándola como uno de los tres puntos calientes del planeta (junto al Ártico y Siberia), también se han registrado años fríos en relación al promedio anual para el sector, como fueron el 2007, 2009 y 2011. Eso explicaría la persistencia de la cubierta de nieve durante este verano en un área normalmente libre de ella, como habitualmente ocurre en el sector donde están las bases chilenas, agrega el Dr. Jaña.
Proyectos en terreno
En total, en la temporada se trasladan 262 personas al continente antártico y de ese número, 116 son científicos chilenos (un 78 % más que el 2012). Es un número récord en 50 años de historia. Las actividades se extenderán hasta fines de marzo.
Chile financia proyectos que van desde los 3 millones de pesos hasta investigaciones de impacto mundial sobre el millón de dólares. Uno de estos últimos, es liderado por el Dr. Iván Gómez, de la Universidad Austral. El proyecto financiado a través del Programa de Colaboración INACH-CONICYT (Anillos Antárticos), indagará sobre el impacto del cambio global, en dos de sus principales manifestaciones: el alza de las temperaturas y el efecto de la radiación UV, sobre las algas, principalmente en bahía Fildes, donde queremos hacer una serie de experimentos viendo la adaptación fisiológica.
Otro aspecto interesante de este proyecto es que integra la ecología del sistema en el análisis para saber cuál es el estado de estas comunidades, cuál es su salud y cómo son capaces de tolerar este tipo de cambios y si tienen un potencial para cambios futuros, revela el fotobiólogo Iván Gómez. Este es el primer año de terreno de un total de tres.
También viene la Dra. Marina Stepanova, de la Universidad de Santiago, quien estudia las auroras australes, como fenómeno asociado a alteraciones que sufre el campo magnético terrestre. A ella le interesan por el impacto que tienen sobre la actividad terrestre, por ejemplo, no funcionan bien los GPS, hay blackout, se producen cargas en conductos de petróleo e incluso impacto sobre la vida humana. Este es un pequeño pedazo para armar este rompecabezas de la relación Sol-Tierra que estamos haciendo ahora en las bases antárticas chilenas, expone la doctora en Física Espacial.
Este proyecto Fondecyt también reemplazará dos magnetómetros: uno en base OHiggins y otro en la base Escudero, siendo estos parte de una red global de monitoreo de estos fenómenos que suceden en la magnetósfera.
Finalmente, otro tipo de estudios se realiza gracias a las becas de apoyo a tesis de pre o post grado. Un ejemplo es Sebastián Morales, estudiante de Ingeniería en Biotecnología Vegetal de la Universidad de Concepción, cuya tesis de título indagará sobre una de las plantas que habita este lugar, Deschampsia antarctica, y su relación con el calentamiento global. Según expresa Morales, en particular le interesa estudiar a cierto tipo de hongos que hoy, por los cambios ambientales, están creciendo en población y produciendo daños a esta planta.
De esta forma, Chile se está posicionando como una nación con un programa líder a nivel latinoamericano, comparable a algunos países europeos, al aumentar el número de investigadores nacionales con interés en la Antártica y desarrollar ciencia en temas de impacto mundial.
Dos educadores con amplia formación y trayectoria fueron seleccionados por medio del sistema de Alta Dirección Pública para encabezar los próximos cinco años la gestión educativa en sendos recintos de enseñanza técnico profesional.
Dos educadores con amplia formación y trayectoria fueron seleccionados por medio del sistema de Alta Dirección Pública para encabezar los próximos cinco años la gestión educativa en sendos recintos de enseñanza técnico profesional.