Desde 2013, cuando se instaló el cierre perimetral, que los edificios de calle Ovejero comenzaron a recibir un mejoramiento integral de parte del Ministerio de Vivienda y Urbanismo. Hoy el seremi José Miguel Horcos y el director regional (s) de Serviu Jorge Negrón, hicieron entrega a los vecinos de las obras que cambiaron definitivamente la imagen del condominio Las Vertientes, que ahora cuenta con aislamiento térmico y revestimiento de vinil siding en todos los edificios.
Se trata de una segunda etapa de recuperación de este conjunto habitacional construido en 1978, a través del Programa de Mejoramiento de Condominios Sociales del MINVU, que tuvo una inversión que superó los 560 millones de pesos.
Al respecto, el seremi de Vivienda y Urbanismo José Miguel Horcos destacó que “son 136 familias que se unieron para mejorar las condiciones de habitabilidad de sus departamentos, lo que se ha hecho en distintas etapas. Con esta segunda etapa, además de la imagen, les permite ahorrar energía y bajar el consumo de gas”.
Previamente, una primera etapa permitió el cambio de cubiertas, que incluyó aislación, aleros, canaletas y también control de plaga de palomas. Además el cambio de ventanas a termopanel en todos los departamentos.
En esa oportunidad también se consideró la reparación de la estructura metálica de las escaleras, cambio de peldaños y reemplazo de barandas en madera de lenga. A su vez se realizó la canalización de cables e instalación de casetas para los medidores de gas y agua.
Según explicó el director regional (s) de Serviu Jorge Negrón, “estamos a la espera de la asignación de recursos para la ejecución de una tercera etapa y final que permitirá el cierre de las cajas escala, concluyendo un mejoramiento integral de estos antiguos edificios de Punta Arenas”.
Alejandro Mijalic, presidente de la copropiedad del condominio Las Vertientes manifestó que son seis años de trabajo, “y este año espero que cerremos la caja escala con puerta en el primer piso y ventanas en termopanel”.
Mientras, Nely Acevedo vecina de la copropiedad y viviendo hace cuarenta años en el condominio, manifestó estar muy contenta, “porque ahora se ahorra un poquito de calefacción y el departamento está calentito. Ahora estamos esperando el cierre de la escala, porque cuando hay viento es complicado circular por ahí”.