A dicho beneficio pueden postular usuarias y usuarios de CONADI, mayores de 18 años que cuenten con su certificado de calidad indígena y que pertenezcan a los tramos entre el 40 y 60 por ciento de vulnerabilidad social. Lo informó la delegada Romina Álvarez junto al encargado de la oficina provincial de CONADI, Mauricio Dominguez, destacando que el apoyo está orientado al mejoramiento de las necesidades básicas, con ayudas sociales de insumos de salud; y, por otra parte, al fortalecimiento del desarrollo productivo. “Les invitamos a acercarse a la Delegación Presidencial a despejar sus dudas y realizar sus consultas y por supuesto poder adquirir los beneficios que este convenio trae consigo”, indicó la autoridad. Por su parte, en representación de CONADI, Mauricio Dominguez dijo estar dispuesto a recibir todas las consultas necesarias para que población indígena postule a estos fondos, pudiendo acercarse de lunes a viernes de 08:30 a 13:00 horas. El convenio de ejecución por asignación directa es de $32 millones de pesos, recursos que serán destinados sólo para habitantes de la provincia de Última Esperanza y que cumplan con los requisitos descritos, pudiendo postular a la adquisición de medicamentos, alimentación especial, exámenes, insumos quirúrgicos como prótesis, entre otras. También pueden postular a la adquisición de materiales de construcción, artefactos básicos para una vivienda y herramientas para el desarrollo de algún oficio que fomente la economía familiar.
No nos sorprende lo ocurrido con la Corporación Nacional Forestal, CONAF, y su insistencia en imponer los planes de manejo que hizo junto a organizaciones de activistas ambientalistas. No nos sorprendemos porque advertimos ya de antemano acerca del origen distorsionado y el procedimiento acomodado a los intereses de esas organizaciones que mostraba el proceso. Se lo dijimos a la dirección de la CONAF, en carta que hicimos llegar a la Contraloría General de la República para ir dejando antecedentes de nuestra posición. El problema que enfrenta Chile con estas organizaciones es muy profundo. Probablemente atraídas por la influencia histórica que han tenido las instituciones públicas en modelar la sociedad chilena, los activistas diseñaron una estrategia de copamiento de estas instituciones. Torcieron con ello el sentido de tales instituciones públicas para satisfacer así sus propios intereses y el de sus mandantes del Hemisferio Norte. Lo vimos hace un par de años nada menos que en el Ministerio de Relaciones Exteriores; lo vemos ahora en la Subsecretaría de Pesca y en CONAF, por nombrar los involucrados en este caso. Es más, la cuestión de los convenios y las fundaciones no es ajena a esta estrategia de copamiento institucional. Pero por muy estrategia que sea, las estrategias también se pueden hacer mal y resultar en desastres. Ocurren esas cosas. No es nada de extraño el interés de estas ONG por el Parque Nacional Bernardo O’Higgins, reconocido a nivel mundial como un importante reservorio de agua, a toda costa han mandatado a CONAF sacar adelante el plan de manejo a como de lugar, no tomando en cuenta las opiniones de la Comunidad Indígena Kawésqar de Puerto Edén y menos de sus 60 habitantes que hoy viven en la localidad. El artilugio está ahí, hacerlo con aquellos que vivieron en Puerto Edén, pero que hace muchos años viven en distintas partes de Chile y no tienen ninguna conexión con la localidad. Pero si de profundos problemas se trata, el abandono del Estado hacia sus territorios es toda una tragedia. Que entre Tortel en Aysén, y Puerto Natales en Magallanes haya sólo una villa, la de Puerto Edén, es demostrativo de ese abandono. Una villa abandonada por el Estado sin administración, sin una inversión clara, sin proyecciones para este puñado de hombres y mujeres que a pesar de ello siguen haciendo soberanía; con continuas presiones para que emigremos de ella y nos declaremos folclóricamente como originarios de Puerto Edén, sin vivir aquí, que hoy está de moda y que CONAF ampara bajo un supuesto derecho de injerencia. Es de esperar que las políticas públicas que se implementen para Puerto Edén serán consultados a aquellos que dicen haber vivido en aquel lugar y mientras los verdaderos habitantes no van a tener ninguna posibilidad de poder decidir su destino. Claro, esto alimenta los sueños de esas organizaciones activistas de apoderarse de estos espacios para placer y beneficio de sus multimillonarios mecenas. Imaginarse un país vaciado gobernado por ellos, es toda una exquisita utopía. Ver paisajes sin gentes que molesten sus bellezas, es irresistible absolutamente. Los planes de manejo de CONAF y sus organizaciones de activistas es la puerta de entrada para que esos multimillonarios en dólares se apropien de los territorios de la Patagonia Occidental, entre ellos del Parque Nacional Bernardo O’Higgins, como ya lo hacen también en la Patagonia oriental. Y nuestro Ministerio de Relaciones Exteriores preocupado de la Antártica, cuando está perdiendo la Patagonia. Notable. Los chilenos deben anotar. Luego el gobierno les va a entregar los parques y reservas a esas organizaciones del colonialismo verde, evitando de esta manera cualquier posibilidad de invertir y mejorar la calidad de vida de sus habitantes. Anoten. Las organizaciones indígenas tenemos de contraparte al Estado, no a estas instituciones. Por lo tanto, el debilitamiento del Estado es también debilitamiento de nuestros derechos. Por lo mismo, nuestra comunidad, junto con rechazar la forma y el fondo de los planes de manejo que busca imponer CONAF y el Gobierno de Chile, ha evitado involucrarse en campañas de las ONG verdes, por saber a ciencia cierta el que ellas son una forma más del colonialismo y de la intromisión de las grandes corporaciones transnacionales en los territorios que desean. Juan Carlos Tonko Paterito.
Esta mañana, en el programa “Buenos días región” de Polar Comunicaciones, conducido por Cristofher C. Cortez, Karla Raín Barría, psicopedagoga del área de Interculturalidad de la Unidad de Inclusión, Derechos Humanos y Ciudadanía de la Universidad de Magallanes, y Rodrigo González Vivar, investigador del CER-UMAG, conversaron sobre el conversatorio biocultural y la ceremonia Wetxipantu. La conversación, parte de la sección Vive UMAG con Angela Molina del departamento de Comunicaciones de la Universidad de Magallanes, se centró en la Celebración del Día Nacional de los Pueblos Indígenas, que coincide con el solsticio de invierno. El evento busca promover la inclusión de la educación tradicional indígena en la academia, reflexionar sobre la interculturalidad y compartir experiencias y conocimientos entre educadores tradicionales y académicos. Además, se destacó la importancia del We Txipantü, o Año Nuevo Mapuche, como una festividad que celebra la renovación y conexión con la naturaleza. Puedes ver la entrevista aquí:
Recientemente en la sede Willi Antu se realizó la Ceremonia We Tripantu o Año Nuevo Mapuche, la cual se celebra cada solsticio de invierno entre el 21 al 24 de junio, equivalente al día más corto del año en el hemisferio austral. La actividad fue organizada por la Agrupación Mapuche Huilliche Willi Antu y contó con la colaboración de la Municipalidad de Natales. Esta conmemoración representa el día más importante del año para el pueblo Mapuche. El We Tripantu celebra la renovación de un ciclo, en el que existe la posibilidad de retornar y recomenzar las cosas. En la ceremonia, se agradece a la Ñuke Mapu por lo entregado a lo largo del tiempo y se comparte en comunidad con música, comida y juegos típicos como el palín. Además, con la participación de representantes de diferentes pueblos originarios de la comuna, se desarrolló el Nütram o conversatorio en mapudungun, en donde una persona mayor dialoga sobre sus experiencias de vida, su cultura, la historia de su pueblo.
“Por estas consideraciones y visto, además, lo dispuesto en el artículo 20 de la Constitución Política de la República y en al Auto Acordado de la Corte Suprema sobre Tramitación y Fallo del Recurso de Protección de Garantías Constitucionales, se acoge, sin costas, el recurso de protección deducido en contra de la Dirección Ejecutiva de la Corporación Nacional Forestal (CONAF), sólo en cuanto se dispone que la autoridad debe abstenerse de avanzar en las siguientes etapas del proceso de consulta indígena”. Así concluye el dictamen de la Corte de Santiago ante el recurso presentado por la Comunidad Kawésqar “Ancón Sin Salida”, escrito el cual cuestionan el proceso de consulta que lleva adelante la Corporación Nacional Forestal (CONAF), respecto de los Planes de Manejo del Parque Nacional Bernardo O’Higgins, del Parque Nacional Kawésqar y de la Reserva Nacional Kawésqar (RNK), áreas silvestres protegidas de la Región de Magallanes. El fallo agrega que, “la abstención de la consulta, regirá hasta que se haya dado estricto cumplimiento a los objetivos de la primera etapa la Planificación, concordando conjuntamente con las comunidades concernidas la metodología, forma y plazos en que debe llevarse a cabo y en particular, la decisión de realizar un proceso único o diferenciado, respecto de los tres Planes de Manejo en tramitación”. Una de las objeciones que presenta la comunidad Kawésqar “Ancón Sin Salida”, dice relación que la CONAF, quiere llevar una sola consulta para las tres áreas. “Nosotros estamos señalando en nuestro recurso que, el proceso debe ser dividido en tres, vale decir una consulta por cada área, por lo tanto, lo que estamos solicitando, es que, se proceda a retrotraer esta iniciativa y que se tome acuerdo en conjunto, que CONAF acate este dictamen y haga las cosas en la forma que corresponde”, señaló Juan González Álvarez, presidente de la comunidad. González agrega que, el acto que se impugna fue precedido de un larguísimo e irregular proceso administrativo ad hoc llevado a cabo por CONAF, principalmente entre 2017-2023, en cuyo seno se ha pretendido validar el acto recurrido y los Planes de Manejo a consultar que hasta el día de hoy son desconocidos para la Comunidad. Añade que la confección del Plan de Manejo del PNBO ha estado precedida de un proceso aún más largo, que se habría iniciado el 2013 y durante el cual han intervenido diversos actores entre los que no se cuenta a la mayor parte del Pueblo Kawésqar y a esta Comunidad. En tanto Lorenzo Soto, abogado quien patrocinó este recurso, expresó que el dictamen es tomado con satisfacción y esperan que la CONAF de cumplimiento a lo orado por el tribunal, es decir, que retrotraiga el proceso y tome un acuerdo con las comunidades. “Por lo tanto, la CONAF debe paralizar y reformular el proceso y dividirlo por cada plan de manejo de cada área y que no persevere en su conducta abusiva y arbitraria en violación de los derechos fundamentales del pueblo Kawésqar”.
A dicho beneficio pueden postular usuarias y usuarios de CONADI, mayores de 18 años que cuenten con su certificado de calidad indígena y que pertenezcan a los tramos entre el 40 y 60 por ciento de vulnerabilidad social. Lo informó la delegada Romina Álvarez junto al encargado de la oficina provincial de CONADI, Mauricio Dominguez, destacando que el apoyo está orientado al mejoramiento de las necesidades básicas, con ayudas sociales de insumos de salud; y, por otra parte, al fortalecimiento del desarrollo productivo. “Les invitamos a acercarse a la Delegación Presidencial a despejar sus dudas y realizar sus consultas y por supuesto poder adquirir los beneficios que este convenio trae consigo”, indicó la autoridad. Por su parte, en representación de CONADI, Mauricio Dominguez dijo estar dispuesto a recibir todas las consultas necesarias para que población indígena postule a estos fondos, pudiendo acercarse de lunes a viernes de 08:30 a 13:00 horas. El convenio de ejecución por asignación directa es de $32 millones de pesos, recursos que serán destinados sólo para habitantes de la provincia de Última Esperanza y que cumplan con los requisitos descritos, pudiendo postular a la adquisición de medicamentos, alimentación especial, exámenes, insumos quirúrgicos como prótesis, entre otras. También pueden postular a la adquisición de materiales de construcción, artefactos básicos para una vivienda y herramientas para el desarrollo de algún oficio que fomente la economía familiar.
No nos sorprende lo ocurrido con la Corporación Nacional Forestal, CONAF, y su insistencia en imponer los planes de manejo que hizo junto a organizaciones de activistas ambientalistas. No nos sorprendemos porque advertimos ya de antemano acerca del origen distorsionado y el procedimiento acomodado a los intereses de esas organizaciones que mostraba el proceso. Se lo dijimos a la dirección de la CONAF, en carta que hicimos llegar a la Contraloría General de la República para ir dejando antecedentes de nuestra posición. El problema que enfrenta Chile con estas organizaciones es muy profundo. Probablemente atraídas por la influencia histórica que han tenido las instituciones públicas en modelar la sociedad chilena, los activistas diseñaron una estrategia de copamiento de estas instituciones. Torcieron con ello el sentido de tales instituciones públicas para satisfacer así sus propios intereses y el de sus mandantes del Hemisferio Norte. Lo vimos hace un par de años nada menos que en el Ministerio de Relaciones Exteriores; lo vemos ahora en la Subsecretaría de Pesca y en CONAF, por nombrar los involucrados en este caso. Es más, la cuestión de los convenios y las fundaciones no es ajena a esta estrategia de copamiento institucional. Pero por muy estrategia que sea, las estrategias también se pueden hacer mal y resultar en desastres. Ocurren esas cosas. No es nada de extraño el interés de estas ONG por el Parque Nacional Bernardo O’Higgins, reconocido a nivel mundial como un importante reservorio de agua, a toda costa han mandatado a CONAF sacar adelante el plan de manejo a como de lugar, no tomando en cuenta las opiniones de la Comunidad Indígena Kawésqar de Puerto Edén y menos de sus 60 habitantes que hoy viven en la localidad. El artilugio está ahí, hacerlo con aquellos que vivieron en Puerto Edén, pero que hace muchos años viven en distintas partes de Chile y no tienen ninguna conexión con la localidad. Pero si de profundos problemas se trata, el abandono del Estado hacia sus territorios es toda una tragedia. Que entre Tortel en Aysén, y Puerto Natales en Magallanes haya sólo una villa, la de Puerto Edén, es demostrativo de ese abandono. Una villa abandonada por el Estado sin administración, sin una inversión clara, sin proyecciones para este puñado de hombres y mujeres que a pesar de ello siguen haciendo soberanía; con continuas presiones para que emigremos de ella y nos declaremos folclóricamente como originarios de Puerto Edén, sin vivir aquí, que hoy está de moda y que CONAF ampara bajo un supuesto derecho de injerencia. Es de esperar que las políticas públicas que se implementen para Puerto Edén serán consultados a aquellos que dicen haber vivido en aquel lugar y mientras los verdaderos habitantes no van a tener ninguna posibilidad de poder decidir su destino. Claro, esto alimenta los sueños de esas organizaciones activistas de apoderarse de estos espacios para placer y beneficio de sus multimillonarios mecenas. Imaginarse un país vaciado gobernado por ellos, es toda una exquisita utopía. Ver paisajes sin gentes que molesten sus bellezas, es irresistible absolutamente. Los planes de manejo de CONAF y sus organizaciones de activistas es la puerta de entrada para que esos multimillonarios en dólares se apropien de los territorios de la Patagonia Occidental, entre ellos del Parque Nacional Bernardo O’Higgins, como ya lo hacen también en la Patagonia oriental. Y nuestro Ministerio de Relaciones Exteriores preocupado de la Antártica, cuando está perdiendo la Patagonia. Notable. Los chilenos deben anotar. Luego el gobierno les va a entregar los parques y reservas a esas organizaciones del colonialismo verde, evitando de esta manera cualquier posibilidad de invertir y mejorar la calidad de vida de sus habitantes. Anoten. Las organizaciones indígenas tenemos de contraparte al Estado, no a estas instituciones. Por lo tanto, el debilitamiento del Estado es también debilitamiento de nuestros derechos. Por lo mismo, nuestra comunidad, junto con rechazar la forma y el fondo de los planes de manejo que busca imponer CONAF y el Gobierno de Chile, ha evitado involucrarse en campañas de las ONG verdes, por saber a ciencia cierta el que ellas son una forma más del colonialismo y de la intromisión de las grandes corporaciones transnacionales en los territorios que desean. Juan Carlos Tonko Paterito.
Esta mañana, en el programa “Buenos días región” de Polar Comunicaciones, conducido por Cristofher C. Cortez, Karla Raín Barría, psicopedagoga del área de Interculturalidad de la Unidad de Inclusión, Derechos Humanos y Ciudadanía de la Universidad de Magallanes, y Rodrigo González Vivar, investigador del CER-UMAG, conversaron sobre el conversatorio biocultural y la ceremonia Wetxipantu. La conversación, parte de la sección Vive UMAG con Angela Molina del departamento de Comunicaciones de la Universidad de Magallanes, se centró en la Celebración del Día Nacional de los Pueblos Indígenas, que coincide con el solsticio de invierno. El evento busca promover la inclusión de la educación tradicional indígena en la academia, reflexionar sobre la interculturalidad y compartir experiencias y conocimientos entre educadores tradicionales y académicos. Además, se destacó la importancia del We Txipantü, o Año Nuevo Mapuche, como una festividad que celebra la renovación y conexión con la naturaleza. Puedes ver la entrevista aquí:
Recientemente en la sede Willi Antu se realizó la Ceremonia We Tripantu o Año Nuevo Mapuche, la cual se celebra cada solsticio de invierno entre el 21 al 24 de junio, equivalente al día más corto del año en el hemisferio austral. La actividad fue organizada por la Agrupación Mapuche Huilliche Willi Antu y contó con la colaboración de la Municipalidad de Natales. Esta conmemoración representa el día más importante del año para el pueblo Mapuche. El We Tripantu celebra la renovación de un ciclo, en el que existe la posibilidad de retornar y recomenzar las cosas. En la ceremonia, se agradece a la Ñuke Mapu por lo entregado a lo largo del tiempo y se comparte en comunidad con música, comida y juegos típicos como el palín. Además, con la participación de representantes de diferentes pueblos originarios de la comuna, se desarrolló el Nütram o conversatorio en mapudungun, en donde una persona mayor dialoga sobre sus experiencias de vida, su cultura, la historia de su pueblo.
“Por estas consideraciones y visto, además, lo dispuesto en el artículo 20 de la Constitución Política de la República y en al Auto Acordado de la Corte Suprema sobre Tramitación y Fallo del Recurso de Protección de Garantías Constitucionales, se acoge, sin costas, el recurso de protección deducido en contra de la Dirección Ejecutiva de la Corporación Nacional Forestal (CONAF), sólo en cuanto se dispone que la autoridad debe abstenerse de avanzar en las siguientes etapas del proceso de consulta indígena”. Así concluye el dictamen de la Corte de Santiago ante el recurso presentado por la Comunidad Kawésqar “Ancón Sin Salida”, escrito el cual cuestionan el proceso de consulta que lleva adelante la Corporación Nacional Forestal (CONAF), respecto de los Planes de Manejo del Parque Nacional Bernardo O’Higgins, del Parque Nacional Kawésqar y de la Reserva Nacional Kawésqar (RNK), áreas silvestres protegidas de la Región de Magallanes. El fallo agrega que, “la abstención de la consulta, regirá hasta que se haya dado estricto cumplimiento a los objetivos de la primera etapa la Planificación, concordando conjuntamente con las comunidades concernidas la metodología, forma y plazos en que debe llevarse a cabo y en particular, la decisión de realizar un proceso único o diferenciado, respecto de los tres Planes de Manejo en tramitación”. Una de las objeciones que presenta la comunidad Kawésqar “Ancón Sin Salida”, dice relación que la CONAF, quiere llevar una sola consulta para las tres áreas. “Nosotros estamos señalando en nuestro recurso que, el proceso debe ser dividido en tres, vale decir una consulta por cada área, por lo tanto, lo que estamos solicitando, es que, se proceda a retrotraer esta iniciativa y que se tome acuerdo en conjunto, que CONAF acate este dictamen y haga las cosas en la forma que corresponde”, señaló Juan González Álvarez, presidente de la comunidad. González agrega que, el acto que se impugna fue precedido de un larguísimo e irregular proceso administrativo ad hoc llevado a cabo por CONAF, principalmente entre 2017-2023, en cuyo seno se ha pretendido validar el acto recurrido y los Planes de Manejo a consultar que hasta el día de hoy son desconocidos para la Comunidad. Añade que la confección del Plan de Manejo del PNBO ha estado precedida de un proceso aún más largo, que se habría iniciado el 2013 y durante el cual han intervenido diversos actores entre los que no se cuenta a la mayor parte del Pueblo Kawésqar y a esta Comunidad. En tanto Lorenzo Soto, abogado quien patrocinó este recurso, expresó que el dictamen es tomado con satisfacción y esperan que la CONAF de cumplimiento a lo orado por el tribunal, es decir, que retrotraiga el proceso y tome un acuerdo con las comunidades. “Por lo tanto, la CONAF debe paralizar y reformular el proceso y dividirlo por cada plan de manejo de cada área y que no persevere en su conducta abusiva y arbitraria en violación de los derechos fundamentales del pueblo Kawésqar”.