Los sistemas de climatización son una más de las diferentes alternativas de calefacción que ofrece el mercado como estufas eléctricas, a gas o parafina. Sin embargo, son la opción más utilizada en lugares de trabajo para mantener una temperatura estable. Pero, la falta de mantenimiento de este tipo de equipamiento trae asociados problemas que afectan la salud de los trabajadores y la eficiencia energética en las empresas y por ende aumento de costos.
En la actualidad, la mayoría de las personas pasan largas horas en sus trabajos, los que habitualmente se desarrollan en espacios cerrados y sin ventilación natural. Es por esto que el correcto funcionamiento de estos sistemas es primordial dentro de las organizaciones.
En este contexto, la Red de Expertos de Sodexo, empresa líder en Servicios de Calidad de Vida, entrega una serie de recomendaciones para mantener los sistemas de climatización en perfectas condiciones. El mantenimiento de las unidades de aire acondicionado y calefacción no es un gasto, sino que una inversión que perdura con el tiempo, explican los especialistas.
Aspectos a considerar
Una limpieza periódica de filtros es fundamental para evitar problemas de salud. Lo ideal es realizar el mantenimiento al finalizar cada temporada. Revisión, limpieza y mantenimiento son los tres pilares básicos con los que una empresa debe contar si quiere hacer un buen uso de su sistema de climatización.
En construcciones o edificios donde la arquitectura se basa en cristal, es recomendable usar vidrios termo paneles, los que reducen la transmisión del calor y el frío, permitiendo ahorros de hasta un 20% en el consumo de sistemas de calefacción.
Mantener el sistema de climatización en un rango de temperatura entre 19° y 25ºC, y mantener una graduación constante, permitiendo una mayor eficiencia.
Al realizar la limpieza del sistema de climatización, se debe hacer funcionar el ventilador aproximadamente de 12 horas con el fin de que se seque la unidad interna del equipo, en el caso de que haya humedad.
El control del equipo también debe de ser limpiado, especialmente las pilas que utiliza, estas se deben remover y guardar en un lugar seco. Es importante que para no dañar el equipo se limpie con un cepillo seco o un pincel, tratando de eliminar las partículas de suciedad o polvo que puedan alojarse.
Cabe destacar que un aparato sin mantenimiento puede significar la diseminación de patógenos en el aire. Los métodos de control son varios pudiendo ser físicos (que implica el uso de filtros de aire que excluyen por tamaño de partícula), químicos (uso de agentes químicos en aerosol para el control y disminución de las cargas microbianas y por irradiación (utilizando luz ultravioleta).