8 de diciembre de 2023
Este 06 de diciembre, desde el aeropuerto “Carlos Ibáñez del Campo” de Punta Arenas, la XXVII Expedición Antártica Ecuatoriana realizó su vuelo de desplazamiento al Territorio Chileno Antártico, aprovechando las condiciones meteorológicas para desplazarse a uno de los rincones más hostiles del mundo.
La Expedición está compuesta por 25 navales, entre oficiales, tripulantes y servidores públicos, los cuales cumplirán una importante labor que es parte de la presencia permanente del Ecuador en el continente Blanco.
Las principales tareas a desarrollar por parte de los expedicionarios son trabajos de reparación y mantenimiento a la estación “Pedro Vicente Maldonado”, desde donde se prestará apoyo logístico a 18 proyectos de investigación, los cuales se desarrollarán en dos fases entre enero y febrero, manteniéndose en el continente blanco por un periodo de 91 días.
La Armada del Ecuador realiza esta importante tarea, realizando coordinaciones de adquisición y traslado de equipamiento con el apoyo de diferentes países, como es el caso de Uruguay que por medio del C-130 de la Fuerza Aérea Uruguaya traslada a los expedicionarios hasta isla Rey Jorge para posteriormente por medios navales de la Patrulla Antártica Naval Argentina hasta isla Greenwich área en donde se emplaza la base, recibiendo el apoyo de la Armada de Chile en el traslado de combustible en el Remolcador de Alta Mar “Galvarino”, y contenedores por parte de las Armadas de Perú y Colombia.
El Capitán de Fragata Estado Mayor Técnico Santiago Coral Carrillo, Coordinador de Asuntos Antárticos del Instituto Oceanográfico y Antártico de la Armada del Ecuador, destaca que “el Ecuador es parte de la Antártica desde el año 1987, año en que se adhirió al Tratado Antártico, realizando inicialmente dos expediciones a bordo del “Orión”, llevando a que en 1990 el Ecuador asciende a miembro consultivo del Tratado Antártico”.
Para el Jefe de la XXVII Expedición Antártica Ecuatoriana, Capitán de Fragata Estado Mayor Juan Carlos Fiallo Molina, “las tareas son diversas, la primera es habilitar la estación después de un año de haberla deshabitado dado que opera en época estival, realizar tareas de sostenimiento logístico”, destacando que “vamos a ingresar una lancha para realizar batimetría en la Antártica, siendo uno de los grandes retos de esta presente expedición”
El resguardo del impacto en el ecosistema antártico es parte importante de las tareas, en este contexto María del Carmen Gamboa, Servidora Pública Química de la expedición comenta que “estoy en esta expedición para cumplir actividades relacionadas con el plan de manejo ambiental, es decir realizar controles ambientales para la finalidad de que la acción humana que se va a desarrolla en esta expedición no aporte nada negativo hacia nuestro ambiente ecosistémico antártico”
El Cabo Primero Hidrógrafo Benito Arocas, ingeniero meteorólogo, quién cumplirá tareas fundamentales en el registro de los fenómenos de la atmósfera y la generación de pronósticos locales, esta es “el monitoreo de las condiciones de la atmósfera, estando pendiente del tiempo y clima, avanzando un poco más con la investigación antártica y las demás investigaciones que se puedan nutrir con la recopilación y análisis que se realiza”.
Cumpliendo el itinerario la XXVII Expedición Antártica Ecuatoriana arribó al continente antártico, tras 5 horas de vuelo, iniciando un nuevo capítulo en la historia del Ecuador en el continente blanco, aportando al desarrollo científico y la comprensión de nuestro mundo.
En fallo unánime, la Primera Sala del tribunal de alzada descartó error de derecho en la sentencia impugnada, dictada por el Juzgado de Letras del Trabajo de Punta Arenas, acogió la demanda y que ordenó, además, el pago de la suma de $50.000.00 por concepto de daño moral y $5.199.582 por feriado legal y proporcional.
En fallo unánime, la Primera Sala del tribunal de alzada descartó error de derecho en la sentencia impugnada, dictada por el Juzgado de Letras del Trabajo de Punta Arenas, acogió la demanda y que ordenó, además, el pago de la suma de $50.000.00 por concepto de daño moral y $5.199.582 por feriado legal y proporcional.