3 de julio de 2020
Sr Director,
Me preocupa seriamente que el Hospital Dr. Marco Chamorro Iglesias de Porvenir obligue a los pacientes a salir de la isla para prestaciones que pueden otorgar perfectamente.
Por prescripción de mi médico tratante en Santiago, debo tomar diariamente un medicamento controlado que solo se vende con receta cheque, con stock en la farmacia local. Sin embargo, ellos indican que no pueden atender la interconsulta para dar una receta para quienes son ISAPRE, invitándolos a recurrir al sector privado del pueblo, que está suspendido desde el inicio de la pandemia. Así, las personas se ven obligadas a recurrir a Punta Arenas e incluso Santiago.
Es muy difícil que los profesionales de la capital envíen recetas cheque, porque la generalidad de éstos ocupa recetas de la “Liga Chilena contra la Epilepsia”, que, paradójicamente, no son aceptadas en sede la regional, pues exigen receta cheque.
Con la imposibilidad de asistir a las consultas de especialidades en Santiago, y con los avances de la telemedicina, esta será una problemática común de muchas personas que deben tomar medicamentos controlados. No puede ser que se exponga a la población fueguina a un brote de COVID por una situación perfectamente evitable.
El Hospital debe cambiar de perspectiva. Su principal función en la promoción y protección de la salud de la comunidad en su conjunto. Hoy su actuar va en el sentido opuesto.
Esteban Barrientos López
Egresado Derecho Universidad de Chile
El proceso obtuvo observaciones procedentes de personas naturales y jurídicas, tales como Greenpace Chile, Fundación para el activismo ojos de mar y la Fundación del Agua (Aquae).
El proceso obtuvo observaciones procedentes de personas naturales y jurídicas, tales como Greenpace Chile, Fundación para el activismo ojos de mar y la Fundación del Agua (Aquae).