2 de marzo de 2025
(CNN) – El papa Francisco describió su fragilidad como una “bendición” y agradeció a Dios “la oportunidad de compartir en cuerpo y espíritu la condición de tantos enfermos y personas que sufren”, en el texto de su oración semanal del Angelus enviado a la prensa este domingo.
Francisco pasó una noche tranquila, dijo el Vaticano el domingo más temprano, agregando que estaba descansando.
También en el texto, el papa expresó su gratitud por las oraciones de todo el mundo. “Siento todo su afecto y cercanía y, en este momento particular, me siento como ‘llevado’ y sostenido por todo el pueblo de Dios”.
El sábado, la Santa Sede informó que Francisco sigue utilizando “ventilación mecánica no invasiva” y oxigenoterapia de alto flujo, tras el episodio de dificultad respiratoria del viernes.
Se encuentra en condición estable y aun sin fiebre, dijo también el Vaticano.
Fuentes vaticanas dijeron a CNN que estos son vistos como avances positivos, pero el cuadro completo de su salud sigue siendo complejo.
Francisco se ha mantenido de buen humor a pesar del episodio del viernes, dijeron las fuentes el sábado, señalando que es capaz de moverse y caminar —a veces con ayuda— y puede comer alimentos sólidos.
Se abstuvo de realizar tareas laborales y descansó durante la mayor parte del sábado, según las fuentes vaticanas. También rezó durante unos 20 minutos en la capilla del hospital el sábado, dijeron.
Más temprano, la santa sede había informado que el papa Francisco desayunó, tomó café y leyó los periódicos.
El episodio de dificultad respiratoria del viernes se complicó con vómitos, algunos de los cuales el papa aspiró, dijo el Vaticano. El personal médico trató el problema de aspiración antes de colocarle un ventilador mecánico, dijo. Una fuente del Vaticano le dijo a CNN que Francisco no está intubado, pero usa una máscara.
Francisco fue ingresado inicialmente en el Hospital Gemelli de Roma hace dos semanas, tras una serie de problemas médicos relacionados con los pulmones, incluida una bronquitis y posteriormente una neumonía. Su hospitalización actual es la cuarta y, hasta ahora, la más larga desde que se convirtió en papa en 2013.
El pontífice ha sufrido problemas pulmonares durante gran parte de su vida. Cuando era joven, padeció una neumonía grave y le extirparon parte de un pulmón.
El Vaticano ha estado publicando actualizaciones sobre la salud del papa dos veces al día. El jueves informó que la condición de Francisco estaba “mejorando”, pero su pronóstico seguía siendo incierto.
La agenda del líder argentino ha sido despejada para permitir su tratamiento médico intensivo.
Más temprano este viernes, el Vaticano anunció que el papa no presidirá la misa del Miércoles de Ceniza la próxima semana, que marca el inicio de la Cuaresma, por segunda vez en sus 12 años de papado. Se espera que un cardenal lidere la ceremonia en su lugar.
Este viernes por la noche, mientras oraba por el papa, el cardenal argentino Víctor Manuel Fernández dijo: “Ciertamente, está en el corazón del Santo Padre que nuestras oraciones sean no solo por él, sino también por todos aquellos que, en este momento particular de drama y sufrimiento en el mundo, llevan el pesado fardo de la guerra, la enfermedad y la pobreza”.