12 de julio de 2014
De tanto en tanto, la Región de Magallanes registra casos de pacientes intoxicados por la ingesta de mariscos con marea roja, cuya incidencia puede ser fatal. Uno de estos hechos cobró la vida de dos pescadores el año 2002, en los fiordos cercanos a Puerto Natales, a raíz de que consumieran siete a nueve cholgas sin analizar.
A nivel del Servicio Médico Legal (SML) en Magallanes, la médico legista María del Carmen Bravo conoció de este caso siendo requerida para realizarles la autopsia. Al ser ésta la primera vez que realizaba este tipo de pericia, ella se contactó con el laboratorio de bioquímica de la Universidad de Chile, y surgió la idea de tomar la mayor cantidad de muestras de fluidos y tejidos y derivarlos a Santiago, con la idea de determinar los tipos de toxinas involucrados. Al final, esta experiencia profesional daría pie a un premiado trabajo de investigación: Intoxicación por veneno paralizante de moluscos bivalvos: Análisis post-mortem en muestras de tejidos y fluidos corporales de víctimas humanas en los fiordos de la Patagonia. Tal estudio se alzó recientemente con la Mención Honrosa en el IV Concurso Distinción Dr. Carlos Ybar 2014.
Alrededor de un año tomó este trabajo de análisis de muestras tomadas de todos los tejidos, llegándose a determinar la presencia de las toxinas gonyautoxinas, saxitoxinas y sus análogos, así como su metabolización a nivel del cuerpo humano y bajo qué forma se eliminaban. En éste participaron además los investigadores Carlos García, Marcelo Lagos y Néstor Lagos, del laboratorio de bioquímica de la Universidad de Chile.
La profesional recordó que en 1991 hubo otro brote de intoxicados y en esa oportunidad el entonces director regional del SML, Dámaso Montebruno, realizó un trabajo que presentó a una revista chilena de medicina y que también guardaba relación con los hallazgos en la autopsia de este tipo de casos.
Junto con relevar a su servicio y en una función de investigación, indicó que a raíz de este nuevo aporte podemos lograr determinar las causas de muerte y los tóxicos que eventualmente pueden ayudar en la detección de antitoxinas que no existen, y que podrían ser de fundamental ayuda como ocurre con los antídotos para ciertos venenos de serpiente.
Por su parte, el director regional del SML, Mario Rubina, destacó como un orgullo que una colaboradora suya obtenga una mención de esta categoría y que tiene que ver con una patología propia de la región. Esto, al tratarse de la única distinción que se otorga después del ganador, siendo destacada entre alrededor de 15 trabajos de todo el país, predominantemente de Santiago. Como aporte, espera que haya ojalá más investigaciones de este tipo.
Finalmente, recordó que en 2010 fueron distinguidos con el premio nacional por el trabajo Estudio Epidemiológico del Suicidio en la Ciudad de Punta Arenas, Región de Magallanes y Antártica Chilena, entre los años 1998 y 2008, a cargo de la perito Lorena Oyarzo, quien ya no está en el servicio. Allí, Rubina también figuró como coinvestigador junto a la doctora Bravo y a su ex director regional Carlos Castro (Q.E.P.D).
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El documento desarrollado en conjunto contiene medidas vinculadas con las condiciones laborales, desarrollo y bienestar docente en las distintas provincias.
El documento desarrollado en conjunto contiene medidas vinculadas con las condiciones laborales, desarrollo y bienestar docente en las distintas provincias.