5 de agosto de 2024
En los últimos cinco años, el hidrógeno verde ha sido promovido como una solución potencial para sustituir los combustibles fósiles en diversas aplicaciones industriales, domésticas y de transporte. Sin embargo, Reuters apunta que recientes avances y análisis sugieren que muchas de sus aplicaciones son poco realistas debido a los costos y las limitaciones tecnológicas.
Auditores de la Unión Europea han calificado los altos objetivos de producción e importación del hidrógeno verde como "excesivamente optimistas" y carentes de un "análisis sólido". Por su parte, la compañía australiana Fortescue ha revisado a la baja sus objetivos de producción de hidrógeno verde, citando los elevados costos de la energía como una barrera significativa.
Actualmente, producir un kilogramo de hidrógeno verde cuesta al menos US$6, cuatro veces más que la producción de hidrógeno convencional a partir de combustibles fósiles. Además, según Michael Liebreich de EcoPragma Capital, la implementación del hidrógeno verde en sectores como la siderurgia, la aviación y el transporte marítimo requeriría una capacidad solar y eólica significativamente mayor a la instalada en todo el mundo durante 2022. A esto se suma la necesidad de infraestructura de almacenamiento y transporte que supere la del hidrógeno convencional.
Por otro lado, la eficiencia energética del hidrógeno verde también presenta desafíos. Según Saul Griffith, asesor climático de la Casa Blanca, al menos el 70% de la energía se pierde en la fabricación y transporte del hidrógeno verde. En comparación, los vehículos eléctricos puros pierden solo el 20% de la energía.
Usos viables y más opciones
A pesar de estos desafíos, el hidrógeno verde tiene aplicaciones viables. Reuters señala que podría sustituir al gas natural en la producción de fertilizantes y productos petroquímicos, así como al carbón en ciertos procesos de fabricación de acero, sector en el que Fortescue ahora concentra sus esfuerzos. También podría desempeñar un papel en el respaldo de emergencia a largo plazo en algunas redes eléctricas.
En muchos casos, las baterías eléctricas, las bombas de calor y el biogás son alternativas más eficientes y económicas que el hidrógeno verde para la generación de electricidad, calefacción y transporte. Estas tecnologías ofrecen soluciones más prácticas y sostenibles en comparación con el hidrógeno verde para muchas aplicaciones.
Por MundoMaritimo
"El plan viene a orientar las obras de infraestructura necesarias para el desarrollo de esta industria y otras actividades comerciales”, detalló durante la exposición el subsecretario de Energía, Luis Felipe Ramos.
"El plan viene a orientar las obras de infraestructura necesarias para el desarrollo de esta industria y otras actividades comerciales”, detalló durante la exposición el subsecretario de Energía, Luis Felipe Ramos.